sábado, febrero 23, 2019

Andar -- Poema

Te juro que sé lo que es estar muerto en vida,
te juro que también desperté, que la luz al final del camino
me invadió, me iluminó, se hizo carne hasta llorar
de amor, de felicidad, de plenitud
y aprendí, y entendí, que vivir es otra cosa
de eso que antes viví con tanto fuego.

Sentí el poder de la brisa,
del agua queda,
del silencio en el titilar de las estrellas
aprendí a seguir otros caminos
en armonía y conflicto, llorando y sonriendo
hasta quedarme solo,
felizmente solo conmigo otra vez de nuevo

Y es hermoso.

Sin embargo en la luz hay sombras,
sombras que golpean
que patean
que escupen
que te absorben,
toman nuestras emociones
y se limpian el culo con ellas.

Y lloré,
lloré hasta que los mocos se escaparon
como estalactitas amargas
cayendo por la nariz y por la boca.
Y me dejaron en humo el alma
y dejaron en hollín mi espíritu
se llevaron la pureza de la magia
y quisieron engañarme dejando la ilusión;
riendo se fueron creyendo
que no podría levantarme.

Tal vez tengan razón,
sin embargo,
me ha prometido el amor,
darme las fuerzas y el tiempo necesario
para lograrlo...