Lo malo de tener miedo
es querer erradicarlo
es pretender superarlo
y dejarlo atrás
para siempre en nuestras vidas
por eso a veces
luchamos desaforados contra él
como si temer
fuera lo peor que podría pasarnos.
El miedo es una guía
que preavisa nuestras limitaciones
nos mantiene al tanto
de lo diferente que es
aquello que creemos ser
de quienes somos realmente.
Escuchar a nuestro miedo
sin ahogarnos en él
es lo más sabio que podemos hacer.
Quien entienda
al miedo como una herramienta
tendrá una senda justa
repleta de aventuras
y de riesgos necesarios.
Al miedo lo enfrenta cualquiera
encontrar en él buen consejo
es sólo para valientes.
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