Deja que el aire sea libre
que la tierra se levante
que las nubes transiten
sin pagar ningún peaje
que los árboles susurren
y que el río cante cualquier canto
sin tener que por esto
pagar derecho de autor.
Deja que el sol brille
y que a todos acaricie,
que la brisa abrace
y que la sombra del maitén
acobije al trashumante.
Deja que la abeja elabore
que el león esté expectante
y que la cebra esté alerta,
deja que los pájaros
de lo alto de sus nidos
empollando ilusiones trinen y lleguen
tan alto como puedan.
Deja que el mundo
siga su camino,
vos
aprendé a seguir la estela
que etérea queda
al margen de la historia.
Nada de todo esto es tuyo
ni tampoco lo será
dejalo libre
y vivirás en libertad.
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