El viento acaricia la piel
de aquellos que se atreven
a llegar a lugares
donde los valientes
transforman el sueño
en realidad.
El sol ilumina el camino
de aquellos que quisieron
ir un paso más allá
de sus propios límites
y pudieron
hacerse realidad.
La noche se abre
con aquellos que encontraron
el secreto que las estrellas
guardan recelosas,
y por amor y connivencia,
de él, a nadie cuentan.
El tiempo se detiene
para aquellos que lograron ocupar
un lugar en la historia,
y pudieron
contra viento y marea
abrir caminos
más allá del espacio.
A esos seres especiales
que con esfuerzo pudieron
el breve homenaje entrego
del viento
el sol
la noche
y el tiempo.
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