El cielo siempre estuvo ahí
a la expectativa de todo
llevándose algunos pájaros
para que con sus alas le hagan cosquillas
arreando a algunas nubes
para que en su vastedad no se pierdan .
El cielo siempre estuvo ahí
mirándonos curioso
dejando pasar al sol y a la luna
para que también nos vean
y por las noches se llena de brillos para llamar nuestra atención
y queramos ir con él.
Pobre... cuánta inocencia tenía usted señor cielo,
hoy anda plagado de aviones y ondas electromagnéticas
de misiles y de humos de bosques que andamos quemando.
Espero que algún día nos entienda y nos perdone,
somos una especie complicada, no vamos de visita a ningún lado,
como buenos egoístas, donde vamos,
conquistamos.
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