Fue en Diciembre -- Poesía

A Gisella

Cuando desembarqué en las orillas de no me olvides
vi tus ojos brillando ansiando el horizonte,
te ofrecí mi mano, para que la tomes
para que te agarres para que vos y yo
a orillas del mar, sobre la arena fresca
caminemos hasta que el sol caiga
y la luna redonda y embarazada
nos descubra amantes y apasionados
sobre las arenas blancas
lamidos por el indeciso ponto
que llega y se va pronto
dejando su húmeda huella de yodo
y caracolas marinas.

Entre besos y miradas
prometí dejar los mares
y navegar tu cuerpo y alma
eternamente
sin juegos de piratas
sin juegos de marinos
sin juegos de palabras
entregado por completo
a tus necesidades y deseos
hasta más allá del juicio
que con la misma vara
a todos nos condene o exonere.

Sé,
que más allá de toda razón o circunstancia
voy a amarte y protegerte
aún después que la muerte
se canse de matarnos una y otra vez
hasta que al fin entienda
que este amor
nacido en las blancas arenas de no me olvides
no hay dolor que lo corrompa
ni olvido que lo borre.