Cambiando cambios -- Poema

A veces me gusta sentarme

al borde del río por el que va mi vida
y ver el agua no siempre cristalina
como va pasando y se lleva
recuerdos que de otros parecieran.

A veces se siente que el tiempo
no es más que una sucesión de momentos,

y uno, cautivo de lo que es, fue y será
cree ser uno de los tantos que andan
en la butaca del medio en la primera fila,
y de tan cerca que está la pantalla,
no podés hacer nada, ni si quiera disfrutar.

A veces deseo irme, no voy a mentirles
a veces quisiera que esta orilla fuera otra
que la ropa no estuviera mojada,
que mis silencios no estuvieran cargados
por un millar de tantas palabras;
que mi mente, más en calma, 

pudiera ovillar la lana desovillada
por los caminos del laberinto
que de repente andado hicimos.

La muerte nunca es solución ni compañera
sin embargo te sigue y recuerda 
que hay fecha de ya no más
por estas y otras tierras.

Las puertas tienden a estar cerradas
y las llaves, ya ves,
cuelgan de ganchos curvos
donde algunos, tal vez, podamos encontrarlas;
pesa sobre los hombros la historia
y uno se rompe, y luego se arma

y uno y nadie nunca más son lo mismo.