un momento de mimos
un tiempo de paz
donde la soledad
sea dulce y consejera
donde nada caiga y se reviente
donde no haya manos negras.
Dame solo un momento
de sosiego,
sin dobles intenciones
sin premios, ni castigos,
sin juicios, ni permisos,
sin licencias, ni incoherencias
por más coherentes que parezcan.
Dejame llegar al nueve,
solo hasta el nueve,
sin más tormentos ni kilombos
que no pueda manejar,
ni aceptar, ni soportar,
menuda paliza me estás dando,
te prometo que en el nueve me levanto
y te sigo dando pelea.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario